Hoy me vais a perdonar una pequeña digresión -palabra del día- para abordar un tema que me parece apasionante y que puede aportarnos una vía de acercamiento lateral al tema de la Metafísica.
La Metafísica, ya lo hemos visto, es la tendencia que tiene -o, al menos, puede sentir- el ser humano por aquellos aspectos no tangibles por los sentidos. Si bien hay quien piensa que lo que no se toca, no se ve, no se huele, no se saborea, no se oye, no existe, hay quienes piensan -y orientan su vida, de hecho, en torno a ello- que existen realidades no perceptibles.
Os he mandado una actividad para el viernes. Debéis retratar -captar, enfocar- alguna realidad metafísica. Y diréis: si estas realidades no se pueden captar por los sentidos, ¿se pueden captar con una cámara?
Muchas veces os he dicho que la existencia de realidades no tangibles no pueden demostrarse -Dios, el alma, el amor-, pero sí mostrar los efectos que nos generan, las impresiones que percibimos de estas experiencias.
Quien no puede demostrar la existencia del AMOR como concepto, muestra cara de enamorado cuando se ve asaltado por esta emoción.
Bien, pues la fotografía es una disciplina -arte- que nos permite conectar experiencias sensibles-impresiones personales-planteamientos metafísicos.
Os dejo una entrevista al fotógrafo italiano Nicola Lorusso. No tiene desperdicio. En primer lugar, porque repasa sus inicios en la fotografía cuando tenía vuestra edad y muchos menos medios. Y, segundo, porque nos habla de impresiones profundas a raíz de una visión trascendente de la cotidianidad.
A ver si la lectura de este artículo os anima a ser creativos con vuestras fotografías. Las mejores las colgaré en el blog.
(PINCHA EN LA IMAGEN PARA ACCEDER AL ARTÍCULO)
Pdt: el fotógrafo comparte nombre con uno de mis personajes cinematográficos preferidos: el sargento Nicola Lorusso, de la película Mediterráneo.
Levantemos esto en la medida de lo imposible.
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