Hola, queridos:
Si realizásemos una encuesta acerca de los impuestos entre nuestros familiares, vecinos y amigos, obtendríamos estas respuestas:
1- En España pagamos muchos impuestos en relación a los servicios que se nos prestan.
2- Hay un delito fiscal enorme.
3- Se hace una mala gestión del dinero recaudado.
Además, en las comunidades autónomas más ricas, tendríamos una respuesta extra:
4- Mi comunidad autónoma paga más de lo que recibe del Estado.
Como todo en esta vida, es matizable, en algunos casos rebatible, pero suele suceder que esconde unos posos de verdad.
EN ESPAÑA PAGAMOS POCOS IMPUESTOS.
Como suena. En comparación con la media de la UE y con los países que forman ésta, España debería incrementar un 6% su presión fiscal para estar a la altura.
España recauda poco, apenas un 33% de su PIB, frente al 47% de Francia o el 41% de la UE.
LA CARGA NO ESTÁ BIEN REPARTIDA.
Es cierto que la percepción de que unos soportamos más el peso que otros colectivos sociales descansa en la particular estructura de impuestos hacia los autónomos -más de 3.000.000 de españoles- o hacia las Pymes y grandes empresas -las primeras pagan un 18,37% de Impuesto de Sociedades frente al 7,7% de las segundas-.
HAY MUCHO DELITO FISCAL.
Las estimaciones -no hay datos exactos, claro-, son escalofriantes: 26.000.000€ de 2018. Y de ello, un 70% estaría protagonizado por las grandes empresas y patrimonios y un 30% por Pyemes y pequeños contribuyentes.
Si a esto le unimos lo mediático de estos fraudes: paraísos fiscales, deportistas famosos, políticos en ejercicio... Tenemos una percepción de que el sistema está pensado para recaudar entre las clases medias y bajas.
NO PAGAN LAS COMUNIDADES AUTÓNOMAS, SINO LOS CIUDADANOS.
Esto ya lo hemos explicado varias veces en clase. Sólo Navarra y las tres provincias vascas contribuyen al mantenimiento del Estado de forma colectiva, gracias a su sistema foral. El resto de comunidades o ciudades autónomas no pagan al Estado, sino que son sus ciudadanos de forma individual. Lo que ocurre es que hay comunidades autónomas donde se concentra más dinero que en otras y, por lo tanto, hay una mayor cantidad de ciudadanos de esa comunidad que pagan más impuestos.
UN SISTEMA GARANTISTA SOCIALMENTE.
Es decir: se destinan muchas partidas a fines sociales: subvenciones, becas, rentas mínimas, ayudas, prestaciones, etc. Esto genera en una parte de la sociedad un sentimiento de discriminación, al tener que pagar impuestos y no poder acceder a ayudas de este tipo.
Levantemos esto en la medida de lo imposible.
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