Queridos todos:
Otro curso que acaba. Un curso singular donde los haya, un curso raro.
Lo peor, todos lo sabemos: la soledad, el encierro, la enfermedad, las pérdidas de seres queridos y una economía tocada en su línea de flotación. Paro, ERTEs, cierres.
Lo mejor, que entre todos hemos sido capaces de levantar "esto en la medida de lo imposible". Muchas horas ante un ordenador, búsquedas de formas diferentes de trabajo, de canales de comunicación, adaptaciones de costumbres y usos y una extraña sensación de no saber bien por qué camino andábamos.
Si algo nos ha enseñado esto es que hay que ser muy, muy, muy flexibles. Analizar, prevenir, proyectar sigue siendo absolutamente necesario, pero no nos va a dar certezas. La vida sigue teniendo sus reglas, ajenas al control humano. Y nos sigue desafiando, como ha hecho en infinidad de ocasiones a lo largo de la Historia.
Es momento de pensar qué es lo esencial y en qué ponemos nuestros empeños.
Una cosa que nos ha acompañado en nuestro encierro ha sido la música. Las canciones pueden tener la capacidad de poner negro sobre blanco lo que pasa por nuestro corazón. En mi caso, mi corazón es sesentero, qué le vamos a hacer.
Como cada año: perdón y gracias.
Perdón porque, como profesor de 170 alumnos, no siempre sé personalizar y no puedo evitar pensar cosas para todos y no para cada uno. Además, tengo el carácter que tengo, con sus luces y sus sombras. Perdón a aquellos que en algún momento del curso se hayan podido sentir mal por algo que haya dicho o callado.
Y gracias porque, como le decía hace poco a alguien, vosotros sois lo mejor de la escuela. No me hice profesor para estar detrás de una pantalla de ordenador. No hay nada mejor que encontrar a treinta alumnos, con sus caras de sueño o, a veces, de interés, sentados en un aula, con sus pensamientos, miedos, anhelos, dudas... Ha sido un honor ser vuestro profesor un año más.
Y, cómo no, os dejo con una canción, un tema viejo, de mis queridos The Kinks, que nos viene que ni pintado. Se llama This time tomorrow (1970) y habla de que nace un tiempo nuevo y que las certezas de ayer, si lo fueron, lo fueron del pasado. Habla de mirar hacia adelante, de dejarse sorprender, de tener los ojos abiertos, de poner ilusión.
Como siempre, os dejo la letra por si a alguno le da por traducir.
(PINCHA PARA REPRODUCIR)
This time tomorrow where will we be
On a spaceship somewhere sailing across an empty sea
This time tomorrow what will we know
Will we still be here watching an in-flight movie show
I'll leave the sun behind me and watch the clouds as they sadly pass me by
Seven miles below me I can see the world and it ain't so big at all
This time tomorrow what will we see
Field full of houses, endless rows of crowded streets
I don't know where I'm going, I don't want to see
I feel the world below me looking up at me
Leave the sun behind me, and watch the clouds as they sadly pass me by
I'm in perpetual motion and the world below doesn't matter much to me
This time tomorrow where will we be
On a spaceship somewhere sailing across any empty sea
This time tomorrow where will we be
This time tomorrow what will we see
This time tomorrow...
LEVANTEMOS ESTO EN LA MEDIDA DE LO IMPOSIBLE.